El reciclado de los viejos “Golden Boys”

En medio de una pandemia que hace estragos, tanto en lo sanitario como en lo social, económico y  político, no fue nada fácil para los gobernantes mantener el equilibrio entre lo que querían hacer y lo que de verdad debían hacer en ese contexto.

 

Si vamos al ámbito del gobierno municipal, las mayores críticas se dieron por ser la Intendenta Bettina “Histericia” Romero, la que muestra más autoritarismo que autoridad para gobernar; despreciando toda opción por la vía de la concertación y el diálogo con sus empleados. Y si a eso se le suma, precisamente por no saber escuchar, querer hacer sin importar qué ni cómo, da como resultado que lloviera una tormenta de críticas que la obligó a rever algunas cosas, como la de renovar su gabinete. 

 

Y está bien que pensara en oxigenarse con cambios que le diera  otra forma  de encarar su gobierno. Sobre todo que este 2021 es un año electoral, donde se van a renovar las bancas, tanto de concejales como de diputados. Y ella necesita contar con un número de ediles que la acompañen en su segunda etapa de su gestión... y por qué no de algún diputado o senador que le responda políticamente a su proyecto.

 

Es que  ahora, prácticamente está sola en la construcción de un proyecto de ciudad que trascienda más allá de su mandato.

 

Consciente de que las cosas no andaban bien, en su política de gobierno; más las sugerencias, sin dudas de su papito el JUCARO, tomó la determinación de incorporar a su equipo de gobierno a dos viejos dirigentes, muy allegados al senador nacional salteño, por Cambiemos.

 

Nos referimos al “Radical”  José Luis Napoleón “Maratonista” Gambetta y al dirigente peronista Miguel Torino.

 

El otro romerista que se había incorporado poco antes, “Fili” Palópolis,  quiso abrir una instancia  de diálogo con el dirigente  gremial de la UTM, Pedro Serrudo, pero no le alcanzó sus buenas intenciones porque no tenía capacidad de maniobra para llevar adelante una efectiva concertación para calmar, en parte, las legítimas demandas de los municipales. Fue más un pase de vaselina que no convenció a los veteranos gremialistas.

 

Ahora, con estas nuevas incorporaciones, que a decir  de algunos allegados a la familia Romero son los viejos nuevos “Golden Boys” que incorpora Bettina, es un mensaje quizás muy grotesco de parte de ella, al querer dar una imagen de renovación de nuevas figuras, con ideas nuevas; aunque ya no tenemos que hablar de edad, sino  de cualidad. Eso lo que ella  querrá  mostrar... La figura de nuevos dirigentes de la política  no tiene que ver con la idea sino con la mentalidad o las ideas renovadoras.

 

Parece que, al igual que en el PJ local, tomado por asalto por los saencistas, sino  sos del mismo palo (amigos o familiares) no tenes cabida en una gestión de gobierno. Los jóvenes dirigentes deben seguir esperando, salvo que sean contaminados por la vieja política subsidiaria de los dueños del poder local.

 

Volvieron los “Golden Boys”, pero más viejos.

 

Capaz que se está armando un nuevo polo de oposición a “Rubertiño” que se va a ver, claramente, tanto el 4  de julio, en las elecciones provinciales, como en las generales  nacionales, donde dicen que “Rubertiño” se declarará prescindente.

 

¿Cómo será no?

 

El tiempo develará estas incógnitas de la vida política de nuestra Salta.