¿Vuelve la centralidad de la política como organizadora de las políticas de Estado?

 

A partir de este Miércoles 3 de agosto de 2022, debería tomarse como punto de partida de la vuelta a la centralidad de la POLÍTICA, con mayúsculas, y ser factor determinante a la hora de ordenar las acciones de gobierno donde no sea  el mercado el que siga ordenando las políticas de especulación pura en desmedro de la justa distribución de las riquezas de este país, con inclusión.

 

Estamos viviendo momentos difíciles en el país, y llegó la hora de tomar el timón del barco y con determinación enderezarlo hacia un destino de grandeza que se merecen todos los argentinos.

 

Y por  un momento, a l escucharlo al nuevo Ministro de Economía, Sergio Massa, nos volvió al cuerpo ese espíritu de esperanza que siempre anida en el fondo de cada ser humano cuando viene sufriendo los efectos de malas determinación que nos lleva al fracaso, en medio de un festival de especulaciones financieras que solo dan ganancias a los que juegan con los recursos de los  argentinos, pero en beneficio de unos pocos.

 

Los agoreros  del fracaso siguen al acecho y activamente sembrando sombras de intangibilidad de los esfuerzos por sacar al país  del letargo en que se encuentra y sin la playa a la vista donde poder desembarcar para comenzar  a caminar un nuevo espacio de recuperación de un país que nunca debió caer en las garras de la especulación y el saqueo de la riqueza que es de todos los argentinos y no de los que  quieren dejar a la Argentina como tierra arrasada, en su voracidad sin límites.

 

Podemos poner miles de  excusas por llegar a donde llegamos; y de estar como estamos en medio de esta incertidumbre sin control y muy pocas esperanzas de salir de esta  grave  situación.  Pero lo que sí es cierto que la culpa de todo esto no la tienen los ciudadanos de a pie. El que sufre hambre, decepción, pérdida de credibilidad en las instituciones. La culpa la tienen, y háganse cargo sinceramente, aquellos que solo miran a la política y viven en función de ella, envueltos  en la mezquindad personal o sectorial, sin mirar  que la política es un servicio a la comunidad, y no un nicho donde quieran apropiarse de los sueños de todos, para seguir aumentando el hambre de tantos argentinos, que ven mirar pasar la riqueza de su país, delante de sus propias narices.

 

Quiero que la política vuelva a ser la centralidad de un proyecto de país inclusivo y previsible en su capacidad de desarrollar y potenciar su inmensa riqueza humana y natural.

 

Pero para ello, los políticos deben demostrar de que son capaces de jugar el gran partido de la selección del país. Que todos apostemos al mismo arco y nos olvidemos por un rato, que pertenecemos a uno u otro equipo de  barrio. LA ARGENTINA Y SU GENTE PRIMERO