El gobierno nacional pretende relanzar su proyecto de reforma laboral, ahora por decreto, ya que fracasó en su intento en el Congreso, con un fondo de cese laboral y un banco de horas, entre otros muchos institutos nuevos. Ahora quiso comenzar el diálogo con el sector textil, sindicatos y empresarios, para que apoyen esos cambios que exige el acuerdo con el FMI. Sin embargo los gremios textiles rechazaron lo propuesto por el gobierno, y en cambio exigen urgentes medidas de reactivación para el sector.
La propuesta del gobierno, presentada a consideración de los gremios textiles y cámaras del sector, relanza dos elementos que formaron parte de la fallida reforma laboral de hace dos años: un fondo de cese laboral y un banco de horas. El Gobierno apura a sindicatos y cámaras para que apoyen los cambios, que también reclama el FMI.
Según los gremios, esta propuesta del gobierno, apunta a flexibilizar por decreto el empleo en la industria textil. Sindicatos y cámaras empresarias están sorprendidos por el apuro que muestran los funcionarios para que sus representantes firmen el acuerdo. Ambos actores reclaman soluciones para la profunda crisis que afecta al sector, con cierres de fábricas y despidos masivos.
Y tanto gremios como empresarios, advirtieron al gobierno que el paquete de medidas que quiere implementar el gobierno no paliará el principal problema que es la falta de demanda interna.
Los lineamientos fueron formalizados en una reunión con la participación del Ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica .
Los cuatro gremios del sector textil e indumentaria rechazaron la propuesta del Gobierno de impulsar una reforma laboral y reclamaron en un comunicado "medidas urgentes" para reactivar el trabajo y el empleo en el sector.
En un comunicado firmado por la Asociación Obrera Textil (AOT), la Unión de Cortadores de la Vestimenta (UCIV) Empleados Textiles (SETIA) y el de Obreros de la Industria del Vestido (SOIVA) señalaron que la propuesta del gobierno "no mejora ni la producción ni la productividad".
El Gobierno intentó hacer firmar a los gremios una "Propuesta de Acuerdo y Compromiso por la Producción y el Empleo", en la que propone flexibilizar el pago del aguinaldo, el otorgamiento de las vacaciones, crear un banco de horas, y eliminar el trabajo a domicilio.
El texto que fue rechazado por los gremios propone además institucionalizar en los convenios colectivos textiles las concesiones laborales como el pago en cuotas del aguinaldo o la segmentación forzada de las vacaciones.
Los gremios reclamaron al Gobierno "medidas urgentes y concretas" tendientes a generar "mayor trabajo, producción, poder adquisitivo de los trabajadores y reactivación del sector textil y la indumentaria".
Además rechazan la modificación o derogación de la ley 12.713 de trabajo domiciliario al sostener que su actual vigencia "no genera ningún inconveniente" en el mercado de trabajo.
Al rechazar las modificaciones en los convenios colectivos que propone el Gobierno los gremios sostuvieron que "no generan mejoras en la competitividad, ni empleo, ni trabajo registrado y alteran la paz social y significa una disminución del salario en desmedro de la calidad de vida de los trabajadores".
"Rechazamos enfáticamente el régimen de indemnización por extinción del contrato de trabajo, la modificación del goce de la licencia anual ordinaria, el fraccionamiento del pago del aguinaldo y la creación de un banco de horas", agrega el comunicado al rechazar la propuesta oficial.
El parte enviado al ministro de la Producción, Dante Sica, quien impulsa la reforma, lo firmaron los dirigentes José Listo (AOT), Romildo Ranu (SOIVA), Heraldo Mage (cortadores)y José Minaberrygaray (SETIA).