La semana pasada más de 40 trabajadores de la calera ubicada en La Merced, de propiedad de Agustín Simón Hoyos, llevaron adelante un paro de actividades, en reclamo por la falta de cumplimiento en los salarios y las medidas de seguridad y de trabajadores en situación irregular (en negro). Ante el llamado a conciliación por parte de la Secretaría de Trabajo para el próximo miércoles 10 de julio a hora 12.

Eduardo Gerónimo, secretario general de la Asociación Obrera Minera Argentina (AOMA) en Salta, expresó que la paralización de las actividades, con medidas de acción directa, se llevaron a cabo luego de intentar acordar una resolución de sus demandas ante la demanda

 

“Hemos tratado de ir al diálogo, de tratar de que respeten los acuerdos, el convenio colectivo de trabajo, y lamentablemente no se cumplen”, sostuvo.

 

Nosotros siempre hemos apostado al diálogo para la resolución de los conflictos, pero el dueño de la calera de la Merced, Simón Agustín Hoyos, apostó más bien al no cumplimiento con los derechos de los trabajadores, obligándonos a tomar las medidas de fuerza”. Acotó Gerónimo

 

“Lo que nosotros quereos es que respeten los acuerdos salariales que se firman en las paritarias; sin embargo, no cumple ninguno. Es una vergüenza que cuando no cumple ni siquiera con la tercera parte de los salarios de los trabajadores”. “No sólo eso, sino que no se dan las mínimas condiciones laborales de excelencia. No da la ropa que está por convenio, no respeta los protocolos de seguridad, los elementos de protección personal no los entrega. En la situación en la que se está, no se puede operar la planta” afirmó Gerónimo

 

“La verdad que los trabajadores viven una verdadera situación de esclavitud total en la planta. Hay más o menos 40 o 45 trabajadores a los que no les cumplen con nada y están en un estado de irregularidad. Es decir que no tiene ni beneficios sociales ni laborales y salariales”, finalizó.

 

Ante esta situación, los trabajadores de la Calera de La Merced, esperan la reunión de conciliación obligatoria, con la intervención y medicación de la Secretaría de Trabajo, se llegue a una resolución del problema que tienen con la Calera.

 

Sin embargo, no se descartan realizar denuncias ante la secretaría de minería o incluso la justicia por las pésimas condiciones laborales.