Las instituciones de Salta son débiles y permiten la hegemonía del Gobernador. La Corte de Justicia es elegida por el gobernador sin dar razón de su elección, como ocurre también en la terna de magistrados que eleva el Consejo de la Magistratura. Esto afecta la independencia del Poder Judicial e impide la aplicación en Salta de los principios republicanos. 

 

Sus actos no son controlados por la Auditoría de la Provincia, refugio de amigos, y el Poder Legislativo usualmente acata las directivas del Gobernador, en lugar de ser el control del Poder Ejecutivo. El bloque mayoritario de la Cámara de Diputados se denomina “SÁENZ CONDUCCIÓN”.

 

Las falencias republicanas detalladas, se pueden corregir en la Justicia. Pero los jueces deben ser ilustrados jurídicamente, probos e independientes. En este proceso es fundamental el Consejo de la Magistratura, donde concursan los jueces y fiscales. Un concurso limpio garantiza que accedan a la magistratura los más idóneos.

 

El Consejo de la Magistratura está integrado por jueces, diputados y abogados. El 10 de marzo se eligen los representantes de la abogacía.

 

Se presentaron cinco listas. Una de ellas, JUSTICIA NUEVA, está encabezada por Armando Caro Figueroa, cuyos conocimientos jurídicos y su probidad los conozco desde hace cincuenta años. 

 

Armando se recibió de abogado a los 19 años. Fue fiscal, con actuaciones descollantes contra la usura y en especial en el amparo que declaró inconstitucional un decreto ley del gobierno militar, que sometía a los civiles a los tribunales militares. Fue Fiscal de Estado y abogado sindical. En 1976 tuvo que emigrar a España en salvaguarda de su vida y su libertad.

 

Allí fue asesor de la central sindical más importante. Escribió libros sobre materia laboral, conjuntamente con Sergio Santillán y fue Jefe de Gabinete del Ministro de trabajo de España.

 

De regreso a nuestro país, fue Secretario de Trabajo de la Nación y posteriormente Ministro en el mismo ramo. Recientemente escribió un Tratado sobre la huelga, además de numerosos libros.

 

Hoy ejerce en Salta su profesión de abogado y se integró a FOCIS (Foro de Observación de la Calidad Institucional de Salta).

 

Con otras abogadas y abogados conformaron la lista “ABOGACÍA NUEVA”. Armando y los otros integrantes, jurídicamente bien formados, son una garantía que en el proceso de selección de jueces no existirán trampas. Y si las hubiera, la certeza de su denuncia

 

Serán eficaces a la hora de defender la independencia del Poder Judicial. Las elecciones se realizarán el día 10 de marzo.

Esta nota no está dirigida solo a los abogados y abogadas. Pretendo que la comunidad se involucre. La justicia salteña tiene mala imagen. Con nuestro protagonismo y nuestro rechazo a los acomodos, podemos lograr una justicia que nos garantice dar a cada uno lo suyo.

 

Cada uno de los lectores es probable que conozca algún abogado, pariente o amigo y nuestro pedido es que los interesen en votar la lista de Armando Caro Figueroa. Este pequeño ejercicio cívico nos permitirá ir creciendo como comunidad con criterio propio. Mis respetos.