El Gobernador llama a todos a ser parte del Pacto de Güemes
Podemos decir que no es muy original, ya el Presidente viajero se había montado sobre una fecha patria para convocar al Pacto de Mayo que ahora “podría ser de Junio o de Julio” según Francos, el flamante Jefe de Gabinete Nacional.
La convocatoria comenzó por lo más “granado” de la política provincial, convocando a los dos ex gobernadores a sumarse a la patriada. En esa foto están todos los responsables de que la sociedad salteña se encuentre como está. Allí están los que trajeron la pobreza a números inaceptables, los impidieron con su omisión que se “Integraran Barrios Populares”, que murieran niños de hambre, que no llegue el agua a Tartagal y todo su departamento, o que EDESA siga quemando electrodomésticos en Orán cobrando el Kilowat más que las provincias vecinas.
Pero peor es que allí están quienes autorizaron un modelo minero que no le deja nada a su propietario verdadero, el pueblo de Salta.
Ayer convocó a los representantes de los trabajadores, léase CGT, a estampar sus firmas. Va avanzando en conseguir una representación importante para “su” Pacto. Según su ministro Martín de los Ríos, la lista continúa con las universidades, las organizaciones intermedias, las cámaras empresarias, etc.
Está muy bien, porque, aunque el documento se estaría elaborando, lo que surge son 8 páginas que comienzan con generalidades sobre el bien común, la educación, el trabajo mancomunado, solidario y la salud, ponele, y al final llega a la esencia de la cosa, el reclamo efusivo de fondos para terminar la obra pública. Fondos que son nuestros, aclaremos.
Allí sí sabemos de un listado que es parte de las miles de obras detenidas, por el Presidente viajero, en un rapto de desequilibrio místico.
Nadie puede oponerse a construir una ruta, depende cuál, o avanzar con un tren, depende para qué, o prolongar un gasoducto, depende a dónde. Todo lo que esté contenido en el Plan Estratégico de Desarrollo de la Provincia viene bien. Todos lo apoyamos. ¿Podrían mostrar el Plan…?
Ahora tenemos algunas preguntas.
¿Cómo vamos a llevarle agua, luz y gas a los 60 municipios y a los más de 400 barrios populares de la provincia?
¿Cómo vamos a darle de comer a los miles de niños salteños que hoy, ya comen poco?
¿Cómo vamos a fortalecer el sistema de salud que se viene resquebrajando por el desequilibrio de la inversión, solo compensada por el esfuerzo de sus trabajadores?
¿Cuándo vamos a terminar con la inseguridad jurídica de las comunidades aborígenes respecto de sus territorios?
Porque no nos tenemos que olvidar que al Pacto le pusieron Güemes, y cuando se utilizan ciertos nombres hay que ser respetuoso.
Está muy bien hablar de nuestros bienes naturales, pero entonces, ¿Por qué les pidió a sus diputados nacionales que apoyaran la Ley Bases que prácticamente los privatiza?
Está muy bien hablar del pueblo trabajador salteño convocando a los Gremios a que apoyen el Pacto, pero entonces, ¿Por qué les pidió a sus diputados nacionales que apoyaran la Ley Bases que destruye la Ley de Empleo?
Está muy bien hablar de la independencia de las provincias, pero entonces, ¿Por qué estaba tan dispuesto a firmar el Pacto de Mayo, como usted dijo reiteradas veces, Pacto espurio que sometía a las provincias?
El Espíritu de Güemes estuvo junto a su pueblo, que dio la vida por su líder y aquel le correspondió con el Fuero Gaucho, que los protegió ante el abuso de los patrones.
Un Pacto con el nombre de Güemes debería tener “al pueblo adentro” y este tiene a los ex gobernadores. Está todo dicho.
Este pacto se podría perfectamente llamar el Pacto de Junio o un Pacto de Casta y está bien, vamos todos unidos a pedir plata, total nos van a dar tantos fondos como litros de leche nos da la, por ahora, Ministra Sandra Pettovello.
Dejemos de ser el último orejón del tarro, honremos a Don Martín Miguel.