América Latina está convulsionada otra vez más, y asoma en la región una nueva toma de conciencia de los pueblos en busca de su liberación de un  modelo que oprime, explota, saquea los recursos, asfixia con deudas, y somete con represión y muerte a quienes resisten.

Se reedita la lucha clasista en Venezuela, que asiste a uno de los bloqueos económicos y planes de desestabilización más agudos de los últimos tiempos, una repetición sarcástica de la ley HELMS –BURTON, con financiamiento directo desde el propio Departamento de Estado Norteamericano, con el impostor Juan GUAIDO y la prensa comprada de aliada incondicional.

 

Bolivia enfrenta en estos días la asonada golpista organizada de igual manera, intentando colocar al ignoto especulador de seguros Luis Fernando CAMACHO como presidente paralelo a Evo MORALES AIMA, poniendo en riesgo ciudades enteras y promoviendo directamente la guerra civil.

 

La traición de LENIN MORENO en Ecuador, ha revitalizado las bases nacionales y populares que resisten con tenacidad el intento de plan de ajuste  del FMI, y se prepara el retorno de Rafael CORREA en un futuro no lejano, en la búsqueda del camino de reconstrucción de un programa económico nacional y sin injerencias extranjeras.

 

Al mismo tiempo y exiliado en su  propio país el presidente Sebastián PIÑERA trata de ensayar excusas y prometer cambios relativos a una política de expoliación y sometimiento de más de treinta años, y el pueblo en movilización ejemplar espontánea, reclama sin hesitar su renuncia lisa y llana.

 

Argentina, menos convulsionada y en un proceso de transición electoral, se apresta a renovar autoridades el próximo 10 de Diciembre, retomando las riendas del País una conducción que si bien dista mucho de ser revolucionaria, encarará seguramente una línea de gobierno distinta a la oligarquía devastadora de los últimos cuatro años.

 

Brasil por el contrario luego de la vergonzosa destitución de VILMA ROUSSEFF y la inexplicable cárcel de LULA DA SILVA, -que hoy llega a su fin-retomó la senda del neoliberalismo faccioso seducida por la arenga de un ex militar retrógrado, racista y homofóbico,  en una especie de pesadilla hipnótica que en pocos meses ha elevado los niveles de pobreza y la desocupación.

 

Este escenario no es nuevo en la historia de los pueblos latinoamericanos, y cíclicamente –con la sola excepción de Cuba- vemos repetirse una historia de idas y venidas entre movimientos nacionales y populares que hastiados de los sistemas opresores, buscan salidas para mayorías, pero que inexorablemente son seducidos más tarde para nuevas aventuras neoliberales.

 

Y es que definitivamente deberemos asumir el rol activo, protagónico, incisivo y determinante, de no dejar que las usinas de desinformación programada para el engaño y la mentira orquestada, sigan reteniendo a los ciudadanos frente a las  pantallas de la televisión y los medios gráficos y radiales hegemónicos de proyectos imperialistas.

 

El no hacerlo y dejarnos seducir por la falsa premisa de la libertad de prensa, que esconde en realidad el libertinaje de empresas comprometidas con un sistema concentrado para pocos y excluyente de las mayorías, será una nueva oportunidad perdida de librar la batalla cultural que vamos perdiendo.

 

No podemos darnos el lujo de volver a hacer el papel  de inadvertidos ciudadanos que repiten incansablemente las frases hechas que forman opinión vacía, y que para peor, sellan un pensamiento que le es ajeno y sólo beneficiario de una elite que es precisamente, la que detenta el poder de las comunicaciones para dirigir los resultados a sus propios mezquinos intereses. 

 

Esa tarea debe empezar ya en las escuelas, en los centros vecinales, en  los sindicatos, en las plazas, en los barrios, en las unidades básicas de los partidos comprometidos con un proyecto nacional, en las radios, las calles, los semáforos. La militancia a pleno en todo tiempo y en todo lugar.

 

No podemos seguir manteniendo la ingenuidad de no enseñar a nuestros jóvenes que en la actualidad existen las guerras de 4ta y 5ta generación, con  sistemas de multimedios coordinados para crear realidades inexistentes, que los imperialismos ya no invaden con marines –salvo como única instancia- sino que dominan y generan docilidad con dinero, desinformación, operativos de prensa, y formación de opiniones colectivas.

 

Por su parte  la nueva orientación gubernamental deberá, si realmente quiere cambiar este estado de cosas, asumir desde el comienzo el compromiso de no temer a las declaraciones rimbombantes de las mismas organizaciones de supuesta defensa de la libertad de prensa, montadas y financiadas por los defensores de la libertad de empresas, y defendernos con medidas activas y concretas de las guerras de medios.

 

Si estamos siendo invadidos por los nuevos medios modernos de dominación, hay que  abandonar la ingenuidad de que quien controla esa prensa canalla es un tirano, y hay que empezar a combatir  con todas las armas al alcance a los mercenarios que desde una  pantalla, traicionan, defienden intereses de elite, y engañan,  mienten, falsean y dedican sus miserables vidas a vender falacias.

 

No otorgar licencias monopólicas, evitar el montaje de máquinas de inventar, que se dedican a desprestigiar y atentar contra la nacionalidad y los gobiernos que no responden a sus intereses, no es censura, es defensa propia  en la sutil guerra de última generación que nos quieren vender como  virtudes de comunicación, que predicando las libertades individuales generan esclavitud colectiva.

 

De esta manera podrá llegar un día en que, mirar por televisión a Patricia ARCE bañada en pintura roja y el pelo cortado, o a los carabineros chilenos fusilar manifestantes, o a los GUAIDOS y los CAMACHOS provocar golpes de estado y muerte en nombre de la paz, podamos tener  criterio suficiente para rebelarnos, identificar enemigos, y actuar en consecuencia, sin inocencia, y con  las armas necesarias.

 

Será el tiempo en que, asumamos que no hay más tiempo para seguir poniendo nosotros los muertos y los desnutridos; que no hay más margen para el engaño y la traición, y que la oligarquía sin otra Patria que el dinero y los privilegios, no pueden seguir decidiendo nuestros destinos.

 

Si no comprendemos esta ecuación tan simple como real, caeremos en la trampa tan magistralmente anticipada por Mariano MORENO en los albores de la revolución: “Si los pueblos no se ilustran, si no se vulgarizan sus derechos, si cada hombre no conoce lo que vale, lo que puede y lo que se le debe, nuevas ilusiones sucederán a las antiguas, y después de vacilar algún tiempo entre mil incertidumbres, será tal vez nuestra suerte mudar de tiranos sin destruir la tiranía”

 

(*)FM NOTICIAS 88.1 MHZ. - “La Madre Que Las Parió”