El gobernador, Gustavo Sáenz en una inusual apertura de las sesiones ordinaria de la legislatura provincial, dio su mensaje a legisladores y al pueblo de Salta en forma on line, ante la circunstancias del aislamiento social obligatorio a consecuencia de la pandemia del coronavirus.
Una de las frases que se destaco fue: “Estamos obligados a replantear nuestras decisiones y planes por esta situación sanitaria excepcional”
En el marco de un difícil contexto a causa del coronavirus a nivel mundial, nacional y provincial, el gobernador Gustavo Sáenz brindó su primer mensaje sobre el estado general de Salta ante la Asamblea Legislativa, dejando de esta manera abierto el 122 periodo ordinario de sesiones legislativas; en un recinto prácticamente vacío, acompañado por el vicegobernador Oscar Marocco, el titular de la Cámara de Diputados, Esteban Amat, y los secretarios legislativos de las cámaras de Senadores y Diputados. El mensaje es transmitido a toda la provincia a través de un sistema virtual.
En forma virtual estaban conectados, y siguiendo el primer mensaje del gobernador Sáenz, más de 51diputados, de los 60 que integran el cuerpo y 22 senadores de 23.
Agradeció “el esfuerzo y la solidaridad con nuestro norte profundo, y haciendo frente a esta pandemia global que llegó a nuestra tierra.”Esto nos obliga a plantear constantemente nuestras decisiones y planes por esta situación sanitaria excepcional.
Debemos entender que nos debemos cuidar entre todos, no hay medida que sea suficientes sin la solidaridad de cada uno. Agradeció especialmente al personal de salud, fuerzas de seguridad y a todos aquellos que trabajan para cuidar a los salteños… También a la gran mayoría que han respetado el aislamiento. Agrego
Hay que entender que nos debemos cuidar entre todos. No hay medida de parte del Estado que sea suficiente sin la solidaridad de cada uno; cuidándose a sí mismo, a su familia y a toda la sociedad.
“No hay memoria de una situación sanitaria tan alarmante y ello nos obliga a replantear permanentemente nuestras decisiones y planes”.
“Todas las previsiones realizadas han cambiado por esta situación sanitaria absolutamente excepcional.”
“No hay medida de parte del Estado que sea suficiente sin la solidaridad de cada uno”
“Esta conciencia colectiva que nos ha unido contra un enemigo invisible es la misma que nos permite superar grietas”
“No se puede mirar el futuro con los ojos en la nuca. Evaluamos los errores pasados para no cometerlos”
“Hemos realizado las proyecciones económicas pero lo cierto es que no hay certeza del impacto final que tendrá esta pandemia”
“Por los graves acontecimientos ocurridos en el Norte de la Provincia resolvimos enfrentar la delicada situación y poner todos los recursos necesarios para revertirla”.
“Muchos de los problemas de la educación, exceden a la escuela y tienen que ver con factores económicos y sociales”.
“Vamos a tener un impacto en la actividad turística, pero estamos dispuestos a redoblar el esfuerzo en cuanto la situación vuelva a sus carriles habituales”.
“Las demandas han crecido y la infraestructura no ha acompañado ese crecimiento”.
“Quiero decirles que he presentado el Proyecto de Ley que declara la necesidad de la reforma parcial de nuestra Constitución”
El discurso completo
Querido Pueblo de Salta:
Me dirijo a todos en un momento muy difícil para nuestra Provincia y para toda la Patria.
Lo hago desde el corazón, como siempre, y ahora más que nunca, porque me siento uno con cada salteño que está pasando momentos de incertidumbre y angustia.
Quiero agradecer a todos por su compromiso y solidaridad, tanto en la emergencia que ha padecido nuestro Norte profundo y tanto tiempo postergado, como en la manera en que la mayoría de los salteños estamos haciendo frente a esta pandemia global que llegó a nuestra tierra.
No hay memoria de una situación sanitaria tan alarmante y ello nos obliga a replantear permanentemente nuestras decisiones y planes. Todas las previsiones realizadas han cambiado por esta situación sanitaria absolutamente excepcional
Hay que entender que nos debemos cuidar entre todos. No hay medida de parte del Estado que sea suficiente sin la solidaridad de cada uno; cuidándose a sí mismo, a su familia y a toda la sociedad.
Agradezco especialmente a nuestro personal de salud y a las fuerzas de seguridad por el espíritu de sacrificio y la vocación de servicio que vienen demostrando con una entrega total.
Son pilares fundamentales para disminuir lo más posible los efectos de una enfermedad que no conoce fronteras.
También, a la enorme mayoría de salteños que han entendido el mensaje que hicimos llegar y que han respetado el aislamiento social.
He tomado decisiones duras, extraordinarias y excepcionales. La hora así lo necesita. Gracias por su comprensión y compromiso ciudadano.
Sepan que, desde el altísimo honor que me han conferido de ser el gobernador de esta Salta que tanto amo, no descanso ni descansaré en cada día de mi mandato por superar tantas adversidades y hacer de nuestra Provincia un lugar en el que se pueda crecer y prosperar en paz y con equidad.
No dejé mis convicciones olvidadas en algún rincón. Por el contrario, creo que fue en gran medida por ellas la razón de que la gran mayoría de los ciudadanos me eligieron para representarlos y buscar las transformaciones que tanto necesita nuestra Provincia, poniéndola en el lugar que le corresponde en el contexto nacional.
Creo en los triunfos colectivos de los pueblos; en la unión que privilegia objetivos comunes frente a intereses personales o sectoriales; en el esfuerzo articulado entre el Estado y la sociedad civil; en la eficacia de unir aportes y capacidades de los municipios, la Provincia y la Nación para lograr cambiar el presente y asegurar un futuro mejor mediante el trabajo digno, el estudio, la creatividad y el esfuerzo.
Esta conciencia colectiva que nos ha unido contra un enemigo invisible es la misma que nos permite superar grietas, abandonar intereses sectarios y combatir como una comunidad a los otros enemigos comunes: la pobreza, el hambre, la desocupación, la inequidad, la desesperanza.
No quiero que este mensaje sea una sucesión de frases hechas y palabras agradables.
Les hablo desde el corazón y desde el enorme amor que le tengo a nuestra Tierra y que sé que también ustedes tienen.
No vengo a plantear utopías. Por el contrario, iniciamos un camino con muchos obstáculos y que sólo logrará las metas que nos propongamos cuando lo transitemos de la única manera posible para resolver las cosas: la búsqueda permanente de consensos y unidad de objetivos, mirándonos a la cara sin mezquindades ni especulaciones, sin la arrogancia que destruye a las personas y a las sociedades, desde el diálogo y trabajando juntos más allá de las diferencias, pensando en las urgencias y en el mediano y largo plazo, y siendo conscientes de la Salta real en la que vivimos y no de una imaginaria.
Cuando comenzaron a llegar las noticias de los lamentables fallecimientos de nuestros hermanos, pobres de toda pobreza, desnutridos y vulnerables, dije con toda crudeza, pero también con toda sinceridad, que somos una Provincia pobre. Las cosas hay que decirlas como son.
Pero lo somos cuando no deberíamos serlo. Cuando tenemos mucho de lo necesario para que nuestro pueblo viva de otra manera. Lo que falta depende de nosotros, de nuestras decisiones, de nuestro esfuerzo y de cada uno de los sectores que conforman la comunidad.
Me revela la situación de mis hermanos salteños con hambre y no debemos estar dispuestos a que se sostenga en el tiempo.
No se puede mirar el futuro con los ojos en la nuca. Evaluamos los errores pasados para no cometerlos pero nuestra meta es el hoy y el mañana y no pretendo que lo construyamos en soledad, sino desde y con todos los sectores sociales, académicos, económicos y políticos.
Hemos reaccionado con celeridad ante la situación de nuestros hermanos del Norte.
Agradezco la predisposición permanente del presidente Alberto Fernández y de todo su gabinete para acudir con su capacidad de asistencia, no sólo desde las intenciones sino en presencia en el territorio, poniendo el cuerpo, tal como lo hicieron tantas personas de nuestro personal de sanidad, desarrollo social, infraestructura, emergencias, seguridad y toda aquella persona que podía dar su aporte en ayuda de nuestros hermanos.
También destaco y agradezco al Ejército Argentino, que ha puesto toda su capacidad y vocación de servicio en la tarea de reconstrucción del tejido social, desmembrado por tantas carencias fundamentales para la vida, como el acceso al agua potable o las vías de comunicación con los centros asistenciales.
También, a los organismos internacionales con quienes estamos trabajando en planes de asistencia y financiación para el desarrollo.
Tenemos un plan permanente de trabajo al que hemos destinado una partida presupuestaria especial y que incluye no sólo lo nutricional sino también lo educativo, cultural y la infraestructura necesaria para comenzar a revertir la situación de abandono que sufrieron nuestros hermanos del Norte provincial, en particular los miembros de las comunidades originarias.
Agradezco también a los legisladores en ambas Cámaras que han facilitado las herramientas legislativas indispensables para que todo este proceso se ponga en marcha.
Señores legisladores, vivimos una situación excepcional. Hoy me dirijo a ustedes a través de la tecnología ya que no podemos reunirnos físicamente.
Por eso, este mensaje será diferente a lo que tradicionalmente sucede cada año. En esta apertura legislativa, no voy a describir paso a paso el diagnóstico y nuestro plan de gobierno para cada área. Todo ello está a disposición de cada uno de ustedes y de los ciudadanos en la página web oficial del Gobierno de Salta, área por área, para su conocimiento.
Sí, quisiera señalar en esta emergencia que estamos transitando, aunque sea de manera abreviada, algunos puntos de los pilares básicos de nuestro Gobierno como son la Salud, la Educación y el Trabajo. Sin ellos, ningún plan de crecimiento es sustentable en el tiempo.
Pero antes es necesario referirnos a la situación financiera y económica de la Provincia.
La economía argentina viene transitando 2 años de caída en su PBI. Para el año 2020 se esperaba una contracción cercana al 2% pero posiblemente sea mayor.
Hemos realizado las proyecciones económicas pero lo cierto es que no hay certeza del impacto final que tendrá esta pandemia tanto a nivel nacional como local. Trabajamos para estar preparados para convivir con esta dinámica, de la mejor manera posible.
Nuestra provincia cerró el ejercicio 2019 con un déficit de más de $ 1.144 millones. Actualmente nos encontramos con una ley de prórroga de presupuesto, ya que Nación aún no aprobó el suyo. Destaco esto porque el 80% de nuestros recursos son de origen nacional.
La Nación se encuentra en proceso de renegociación de su deuda, y de ella podrá estimar los recursos destinados al presupuesto de este año.
Estamos entonces sin un presupuesto provincial, con una caída real de recursos, atravesando una crisis por la pandemia y en emergencia sociosanitaria.
El carácter excepcional de la situación que atravesamos obliga a repensar continuamente los planes y proyectos.
En este contexto cambiante, nuestro Plan Provincial Económico 2020, tiene como principales objetivos atender las situaciones de emergencia, brindar los servicios básicos de salud, educación y seguridad, fomentar el empleo y asistir a la población más necesitada.
Hemos tomado importantes medidas para menguar el impacto del déficit, como la salida del Consenso Fiscal, moratorias, ahorro desde el control y disminución del gasto, el congelamiento por seis meses de los haberes de los funcionarios públicos y la optimización administrativa del Estado Provincial que incluyó una reducción no menor al 20% de la estructura de cargos políticos del Poder Ejecutivo, conforme a la nueva Ley de Ministerios.
Estamos en un proceso de reperfilación de la deuda provincial para poder aliviar las finanzas y pretendemos aplicar una serie de medidas tendientes a incentivar la recaudación y el desarrollo.
Sabemos que el proceso no es fácil, pero nuestro rumbo es claro. Creemos en los logros que se consiguen en equipo: así lo entienden también los intendentes y los legisladores provinciales con quienes definimos un esquema de prioridades en materia de infraestructura y acciones en diferentes áreas.
Una buena experiencia en este corto tiempo de gobierno, es el consorcio de obras públicas del Norte provincial, espacio en el que interactúan el Gobierno y nueve municipios de los departamentos San Martín y Orán. Los resultados obtenidos nos alientan a replicar este modelo en otras regiones de la Provincia.
Señoras y señores legisladores por los graves acontecimientos ocurridos en el Norte de la Provincia resolvimos enfrentar la delicada situación y poner todos los recursos humanos y materiales necesarios para revertirla, con acciones en el corto y mediano plazo.
Así, desde la salud trabajamos intensamente en el territorio en el abordaje sanitario de la población, con la identificación y atención, llevada a cabo por agentes sanitarios, enfermeros, nutricionistas y médicos en cada uno de los domicilios de las personas.
En la zona se han realizado diferentes valoraciones e identificado personas en riesgo nutricional, algunas de los cuales derivamos para su atención y recuperación.
Se relevaron entre niños y niñas más de mil desnutridos extremos y más de 10 mil en riesgo nutricional, sobre todo entre la población perteneciente a la etnia wichí, con condiciones de alta vulnerabilidad, con dificultad de acceso al agua segura.
Se dotó a los hospitales de la región de mayor recurso humano con más agentes sanitarios, médicos, enfermeros y distribución de residentes. Dispusimos ambulancias y compramos nuevas para cada uno de los hospitales de nuestra Provincia.
En el campo social, trabajamos coordinadamente para la entrega de la Tarjeta Alimentar, que en los departamentos del Norte tiene cerca de 20.000 beneficiarios y en la Provincia alrededor de 55.000.
Desarrollamos tareas con el Ejército en el territorio afectado, tanto para la instalación de plantas potabilizadoras como para la distribución del agua con la entrega de 200 tanques de 1.100 litros para almacenar agua segura, que son llenados por el Ejército en diferentes parajes y comunidades.
En aras de ello gestionamos la llegada de las primeras 100 de 2.000 cosechas de agua, de las que Nación ya envió parte de los fondos.
Gestionamos también nuevas bombas de agua y paneles solares para el funcionamiento de los pozos de agua.
Con acciones concretas, promovemos la equidad y el acceso a herramientas para el fortalecimiento y empoderamiento de nuestras comunidades originarias, las que se hicieron llegar, además, miles de módulos alimentarios.
Los operativos demuestran, como dije antes, nuestra convicción de que el trabajo conjunto entre Nación, Provincia y Municipios es la forma de lograr soluciones para los salteños.
Estas tareas no serán eventuales sino que tenemos la voluntad de que sigan en el tiempo, dotando a esa región en emergencia de la infraestructura, la salud, la educación y la nutrición necesarias para ir cambiando esta realidad tan dolorosa.
Señoras y señores legisladores, como señalé anteriormente, quisiera compartir con ustedes algunos puntos relacionados con nuestros ejes de salud, educación y trabajo.
En los países en los que la educación es una prioridad hay crecimiento económico, mejores índices de salud y movilidad social ascendente.
Hoy, la realidad es que uno de cada dos alumnos no termina la escuela secundaria; uno de cada diez repite el año; cuatro de cada diez tiene sobre-edad.
Esto también se ve reflejado luego en los niveles de educación superior: sólo el 9% de los estudiantes completan sus estudios terciarios y apenas el 4% la universidad.
Los datos de las pruebas PISA y Aprender nos muestran que nuestro País y nuestra Provincia están muy por debajo de lograr aprendizajes satisfactorios.
Otra realidad compleja que debemos tener en cuenta es la infraestructura escolar. Tenemos casi 1100 edificios educativos, muchos de los cuales son antiguos y tienen problemas estructurales desde hace años como filtración en los techos, baños que no están en condiciones, problemas de agua en el establecimiento, entre tantos otros.
Hay edificios precarios y la matrícula crece, lo que requiere nuevos establecimientos y ampliaciones, ya solicitados desde hace un tiempo.
A esta situación de la infraestructura se suma la falta de personal en muchas de las escuelas, producto del congelamiento de vacantes realizada años atrás, debido a problemas presupuestarios.
Pero nuestra realidad económica marca los límites que tenemos. Por eso debemos ser muy eficientes y desde el criterio de equidad, fijar las prioridades en obras de infraestructura escolar y otras necesidades en nuestro presupuesto 2020.
En relación a infraestructura escolar, quisiera informarles que con relación al mantenimiento y tareas de reparación de los establecimientos, firmamos un convenio con el Ministerio de Desarrollo Social de Nación que destinó 1.500 personas, que son parte de planes de empleo, a realizar reparaciones menores de los establecimientos.
Así también, el Ministerio de Educación acordó con los intendentes, un convenio de colaboración para la puesta a punto de las escuelas de sus municipios y obras menores de infraestructura.
Previo al inicio de clases se destinaron 40 millones de pesos que fueron administrados por los directivos de los establecimientos para la compra de materiales.
En cuanto a nuevos edificios, se finalizó la construcción de cinco nuevos establecimientos en Poscaya, Río Blanquito, Paraje Alumbre, La Caldera y en Capital. En ejecución tenemos 11 obras que consisten en ampliaciones de aulas y nuevos edificios, con distintos avances.
Muchos de los problemas de la educación, exceden a la escuela y tienen que ver con factores económicos y sociales.
Es por eso que para resolverlos, la tarea debe ser abordada por todos los sectores de la sociedad, además de los actores de la comunidad educativa, cada uno aportará desde su espacio de decisión y responsabilidad.
Soy consciente de que la escuela se ha convertido en un agente de apoyo social.
En la Provincia contamos con 828 comedores escolares que asisten a casi 180.000 niños y niñas.
Para este año se logró incrementar en un 60% la partida para los comedores que son financiados por el Gobierno Nacional y que se encuentran en las zonas vulnerables y la Provincia ya ha aumentado en la misma cifra lo que destina al Plan Provincial de Nutrición y Educación Alimentaria. Además, está proyectado sumar nuevos comedores a unas 40 unidades educativas más.
En la actual contingencia, se cerraron las escuelas pero a través de módulos alimentarios se sigue brindando el servicio nutricional.
Además del apoyo social, también se continuará la provisión de kit escolares que terminarán de entregarse en las próximas semanas y que van a llegar a unos 250.000 alumnos de toda la Provincia.