El Presidente Alberto Fernández recibió ayer en Olivos a una delegación de empresarios para analizar la salida de la cuarentena.
El presidente Alberto Fernández aceptó la idea de la CGT de crear un comité de crisis junto con el empresariado para analizar la situación económica y social durante la cuarentena y definir los sectores que irán reanudando gradualmente sus tareas para normalizar la actividad después de las Pascuas.
Así se acordó durante una reunión de casi tres horas entre el primer mandatario y la mesa chica de la central obrera que se realizó en la residencia de Olivos. Allí, Alberto Fernández manifestó que quiere que el comité de crisis funcione desde comienzos de la próxima semana porque "ya tenemos que ir viendo cómo salir progresivamente de la emergencia que impone la pandemia", por lo que acordaron seguir en contacto durante este fin de semana para avanzar con esa mesa tripartita.
Una vez que se fue la CGT de Olivos, el Presidente se reunió con una delegación de la Unión Industrial Argentina (UIA), con la que también habló del comité de crisis que está por crearse.
Según fuentes sindicales, Fernández se mostró cauto sobre la reanudación de la actividad económica: "Miren lo que está pasando en España por no tomar precauciones", dijo al mencionar la cantidad explosiva de contagiados y muertos por coronavirus en aquel país. Por eso insistió en la necesidad de acordar una "salida paulatina" de la cuarentena obligatoria.
Entre las alternativas que se barajaron con los dirigentes de la CGT figuran que la vuelta a la actividad normal sea estructurada en turnos de no más de 20 trabajadores para evitar aglomeraciones, con guardias en algunos sectores estratégicos, aunque la clave, se coincidió, es cómo evitar que los medios de transporte se conviertan en una fuente de máximo contagio si viajan muchos pasajeros.
Participaron del encuentro en Olivos el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; el ministro de Trabajo, Claudio Moroni; el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello, y el jefe de asesores de la Presidencia, Juan Manuel Olmos, mientras que la comitiva sindical estuvo integrada por los cotitulares de la CGT, Héctor Daer (Sanidad) y Carlos Acuña (estaciones de servicio), además de Andrés Rodríguez (UPCN), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), Gerardo Martínez (Uocra), Antonio Caló (UOM), Armando Cavalieri (Comercio), Rodolfo Daer (Alimentación), Hugo Benítez (textiles) y Carlos Frigerio (cerveceros).
Luego de una larga introducción del Presidente en la que explicó cómo está evolucionando la pandemia en el país, insistió en que el pico de contagios del coronavirus se producirá a mediados de mayo. A su turno, luego, cada dirigente gremial hizo un repaso de cómo estaba su actividad y los efectos que provoca la cuarentena en las fuentes de trabajo y en los salarios.
Los sindicalistas detallaron después la ayuda que habían prestado para reforzar la atención sanitaria, como la infraestructura de las obras sociales y los hoteles de los gremios que se ofrecieron para alojar a pacientes en cuarentena, y le entregaron toda la información en un pendrive.
Alberto Fernández les agradeció el aporte que estaban haciendo los gremios en esta crisis y aclaró que los fuertes elogios que le dedicó a Hugo Moyano en el Sanatorio Antártida "estaban dirigidos, en realidad, a todos los dirigentes", les aseguró.
Acuerdos y reclamos
El Presidente destacó en la reunión que la pandemia “marcará un antes y un después” en todo el mundo y que en la Argentina, a su juicio, debería llevar a reforzar el papel del Estado, pero con “una reformulación de las políticas de salud” para mejorar y extender las prestaciones a toda la población.
Dijo también que hasta ayer se habían podido repatriar a unos 300.000 argentinos que estaban en el exterior y aseguró que se realiza un “monitoreo constante” sobre ellos: les mostró incluso un mapa interactivo que permite determinar su ubicación y con quiénes cumplen la cuarentena. En un momento de la charla, los sindicalistas plantearon sus reparos por la forma en que el Gobierno les pagó este mes a las obras sociales unos 2.800 millones de pesos que les debía en concepto de reintegros de alta complejidad en clara alusión a los fondos que recibió la obra social de camioneros.
Fuente: Diario El Tribuno de Salta