Diego Pary, que era canciller del presidente EVO MORALES, anunció el 04 de Noviembre de 2019 el inicio del camino de un golpe de Estado en Bolivia (Agencia EFE El Comercio 04/11/2019 - 19,04 hs) y los hechos posteriores lo confirmaron.

Doscientos treinta y nueve años antes, el 04 de Noviembre de 1780 de la mano de José Gabriel CONDORCANQUI NOGERA (TUPAC AMARU II), se daba inicio a la revolución indígena más grande de América, con el sacrificio de cien mil de sus habitantes, incluido el de ese magnífico líder y toda su familia.

 

Los ciclos de la historia enseñan claramente que con la ambición desmedida de poder y riquezas que son el signo miserable del capitalismo y los imperios creados en torno al mismo, no se puede negociar, que se trata de una guerra de intereses, que la única opción es vencer o ser dominados.

 

En la época de TUPAC AMARU se invocaba la biblia, la cruz y el idioma, y si no se obedecía o no se aceptaba el carácter sagrado de esos símbolos, se los esclavizaba, y si se rebelaban se los mataba.

 

 En la actualidad los métodos de dominación, salvo por el avance de la tecnología, son idénticos. Los medios hegemónicos montados por los dueños de la economía engañan, crean  ficciones y las venden como realidades.

 

Así le inventaron al presidente boliviano un hijo no reconocido primero, ser corrupto después, invocar fraude en las elecciones, levantar a las fuerzas armadas, y fabricar atentados para infundir miedo. Todo vale, todo sirve, todo se conjuga para que la enorme realidad del  progreso de Bolivia pasara a un segundo plano. 

 

De esa forma  promocionan a sus esbirros, denigran a todos los que se oponen, invocan ser los mejores, los demás deben obedecerlos votándolos, y si no lo logran conspiran, fabrican golpes de estado, y persiguen y matan a sus adversarios. 

 

El Estado Plurinacional de Bolivia creció sostenidamente durante diez años, tiene inflación más baja que EE.UU, su PBI se quintuplicó, se industrializó, y dirigida por un indio comenzó a elevarse con estabilidad diferenciándose de los otros Países de la región, lo que los invasores no podían permitir. 

 

Francisco de Santa Cruz –lugarteniente de TUPAC AMARU-  fue el traidor de entonces movido por el dinero. Hoy se llaman CAMACHO, MESA, o AÑEZ  pero la historia es la misma, se repite, se renueva, se impone, y domina.

 

El golpe de Estado en Bolivia tiene nombre claro y preciso, y se llama veintiún millones de toneladas de litio. Esa es  la existencia del mineral, que mueve y cada vez moverá más al mundo occidental en baterías, autos, teléfonos y maquinarias, y la rescisión del contrato con una empresa extranjera el 03/11/2019, para dejar de exportar litio crudo y ordenar la industrialización para agregar valor interno.

 

Argentina tiene 873.000 hectáreas asignadas la explotación de litio de baja impureza; es el 4to productor mundial, y se ubica estratégicamente dentro del llamado “Triángulo del Cono Sur del Litio”, junto con Chile y Bolivia.

 

Este dato es publicado constantemente como una buena  noticia, pero no lo es en absoluto. Con una legislación minera que fija un tope del 3% de  regalías netas –deducidos gastos operativos- el saqueo es constante, y también en este caso hay una sola opción: o dejamos que nos sigan robando, o  defendemos lo nuestro.

 

Y si ese camino se comienza a desandar, deberemos  asimilar los mismos desafíos que el presidente EVO MORALES AIMA tuvo que generar en su País,  y  asumir más temprano que tarde, que con ese esquema invasor no se negocia, se lucha, con todos los medios a nuestro alcance, y los vencemos o nos vencen.

 

La misma escena se va presentar cuando se trate del agua dulce de los Esteros del Iberá, el gas pizarra en Vaca Muerta, o la pesca en la plataforma submarina, porque los recursos son escasos para todos, y se los quieren apropiar unos pocos, así de simple.

 

Y por eso tocará a nuestra generación afrontar el destino de tener que organizarnos, movilizarnos, y generar los espacios y los medios para poder contar con todas las herramientas necesarias, para que cuando llegue el momento nos podamos defender.

 

La superstición de la democracia liberal, el voto cada cuatro años, la fiesta electoral y demás frases hechas para mantener el engaño, no pueden seguir siendo los cantos de sirena de los invasores, porque cuando tapemos  nuestros oídos y reaccionemos, nos van a perseguir, nos van a reprimir, y si es necesario nos van a matar.

 

El Ecuador de RAFAEL CORREA, el Paraguay de LUGO; la Bolivia de EVO MORALES, el Chile de Salvador ALLENDE, el Brasil de DILMA y LULA, y la Venezuela de CHAVEZ y MADURO, son ejemplos evidente de lo que se vendrá, porque una sola cosa está clara, estos sujetos vienen por todo. 

 

Y estará en nosotros saber defendernos, proteger nuestra soberanía, resguardar nuestros recursos para las generaciones futuras,  y en definitiva tomar conciencia de lo que valemos, de los que estará en juego, y de que las decisiones a tomar serán muy duras.

 

La base militar yanqui en Vaca Muerta con la excusa de ayuda humanitaria, o la instalación en Posadas de otra similar para supuestamente combatir el narcotráfico en la Triple Frontera, son fortalezas armadas que literalmente han comenzado a dar los primeros pasos de una dominación forzada –invasión- cuando esos intereses concretos –shale gas y agua dulce- vayan a ser apropiados.

 

Se entiende por eso que la defensa que deberemos encarar en nuestro País, no será la de limitarnos a votar candidatos comprados cada cuatro años, sino que  tendrá que ser una estrategia mejor armada, mejor coordinada, sin ingenuidad, con realidad.

 

Y en ese trance fundamental, podremos vencer o ser vencidos. En todo caso, a la aventura del saqueo, el robo, y la traición, no le será fácil, ni gratis. 

 

 

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