Necesitamos un presidente, no un “Mesías” …y menos provocador y extorsionador para los que no piensan como él

Estamos en tiempos de definiciones.  Porque muchas cosas están pasando, y muy serias para nuestro presente y futuro, y no podemos mostrarnos indiferentes.

 

Ya no podemos quedarnos tranquilos como agua de pozo, porque el pueblo desesperanzado y frustrado con un gobierno que prometió combatir la “casta”; pero resulta que la misma son ellos que , la sufren a diario, son echados de sus trabajos, no les alcanzan lo que gana para comer; y donde ellos junto con los jubilados, la salud y la educación son los que están pagando el pesos de este brutal ajuste. Y encima sentir que Milei goza con el sacrificio de los que menos tiene, favoreciendo a unos pocos que se llevan todos…hasta la esperanza.

 

Es por eso que hay que despertarse de esta pesadilla; y nuestros dirigentes, más allá del espacio y color político que tengan, tendrán que definir de qué lado están o estarán, de ahora en más. Ya no hay lugar para las tibiezas o la indiferencia.

 

Tal vez parezca un poco extremo lo que estoy diciendo, pero nuestro pueblo está al límite de sus fuerzas para seguir aguantando tremendo ajuste.

 

Javier Milei, apunta al superávit fiscal... Pero con la plata de las provincias, destruyendo al Estado presente y extorsionando a las provincias que, ya al límite de su capacidad financiera para dar respuestas a las demandas de sus ciudadanos, no pueden seguir prestando servicios de salud, educación y seguridad, como quisieran y son demandados.

Sabemos que nuestro gobernador apostó y sigue apostando al diálogo y a la concertación política para alcanzar los recursos que la Nación debería transferir para dar respuestas a las urgentes necesidades de su pueblo

 

Aunque muchos podremos no estar de acuerdo con ello, la mayoría de los gobernadores le dieron el apoyo a Milei en el Congreso, apoyando todas las leyes para alcanzar el déficit cero. Pero todo acuerdo político se construye en base a lealtades y cumplimiento de la palabra empeñada. Algo que el presidente Milei no conoce ni le interesa aplicar.

 

Los salteños y el país, estamos sufriendo las consecuencias de eso acuerdos cuando el “Javo”, como le dicen, con su estilo provocador extorsionador y de destrato, insultó a los gobernadores, diciéndolos las peores cosas (como es su costumbre) porque presentaron el proyecto de ley para recuperar la capacidad de administrar esos recursos que cobra la Nación y no les da a las provincias como corresponde. Nos referimos al impuesto a los combustibles y los ATN.

 

Por eso nos preguntamos, dónde van a estar parados en las elecciones de octubre, nuestro gobernador a la hora de formar un frente que defienda los intereses, en este caso, de los salteños.

 

La rebelión de los gobernadores, demostró la explosión de la crisis en sus provincias con descalabros en las economías regionales, en las rutas, la educación o la seguridad.

 

Pero también fue un indicio de que las expectativas de la sociedad en el gobierno se redujeron con respecto al 2024.

 

Pero la base de la crisis no está en la visión mesiánica de la política, sino en el programa económico sobre la cual se basó. Un día antes de que cayeran las facultades especiales que le otorgaron muchos de esos gobernadores que ahora le reclaman, Milei y su ministro Federico Sturzenegger desmantelaron muchos organismos del Estado nacional.

 

El Mesías, o quien se crea tal, podrá esperar un milagro. Pero el resquebrajamiento de los mecanismos que administraban las decisiones en el mileísmo es un síntoma de la economía que, al menos hasta ahora, está demostrando que no nos va tan bien.

 

Entonces nos preguntamos, en nuestra provincia, en una contienda tan importante para el futuro del país, como son las elecciones de octubre, el oficialismo provincial dónde está parado. La oposición ya está marcando la cancha a donde y con quien van.

 

Tal vez el silencio del gobernador Sáenz, esconde algo mucho mejor de lo que mucho esperan. ¿Será así.?