Cabot. Pablo Cabot.

Recuerden este nombre. El fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas de Tartajal, Pablo Cabot tiene a su cargo completar el cuadro de los fallecimientos en el norte salteño durante el mes de enero 2020.

Han solicitado completar el cuadro de los fallecidos, ya que del diagnóstico preliminar, surge que entre el 1 de enero y el 27 de enero hubo 13 niños fallecidos y tienen que dilucidar si las causas de los decesos están relacionadas con la desnutrición infantil u otras patologías asociadas.

¿Qué es lo que se sospecharía?

Que parte de esos 13 niños fueron registrados como muerte por una causa “diferente” y que tal vez ese registro hubiera servido para mejorar las estadísticas. ¿Será posible?

Lo cierto es que el Fiscal Pablo Cabot tiene un trabajo de mucha responsabilidad y requerirá de la asistencia de profesionales que puedan evaluar, sin compromisos, que las causas de las muertes están o no vinculadas con cuadros que se supone veníamos atendiendo desde hace muchos años.

Por supuesto que a todos nos gustaría que sean las causas que sean, no mueran niños salteños. Ahora bien: Si la muestra de un mes en el año diera que algunos de los niños SI murieron por causas vinculadas a la desnutrición, deshidratación o enfermedades evitables, digamos que 2 niños se escaparon a los doctores de salud, pregunto, ¿No habría que hacer un relevamiento de todo el 2019? ¿O de más?

Una cuenta sencilla me dice que si hasta ahora tenemos declarados 8 niños fallecidos entre enero y febrero, si llegaran a aparecer 2 mal anotados, esto me indicaría un 25% de error. Un 25% de error en el indicador provincial es pasar de 9,6 0/00 al 12 0/00, lejos de los récords. Claro que esto puede ser solo un problema de esta gestión con sus malas decisiones de fines del año pasado que podrían haber hecho explotar las condiciones de control.

Lo que tiene el Fiscal Pablo Cabot entre manos es lo que siempre tiene que tener la Justicia, la separación entre la verdad y la mentira, objetivamente.

Holmes decía: Si de un análisis has retirado todo lo imposible lo que queda, por más que te parezca inverosímil o te disguste, esa, esa es la verdad.

Suerte Fiscal.