El Gobierno de Alberto Fernández alista a realizar una profunda modificación de los planes sociales que paga el Estado, con la intención de que todos sus beneficiarios realicen una efectiva contraprestación por ello, brindando un servicio a la comunidad. Esta iniciativa podría ser lanzada a fines de febrero para su  aplicación en todo el país.

El objetivo oficial es trabajar de forma conjunta con provincias y municipios para asegurar a estos trabajadores en primera instancia una prestación igual a un salario mínimo, vital y móvil.

 

Esta iniciativa, está siendo elaborada por los ministros de Trabajo, Claudio Moroni; de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; de Desarrollo Social, Daniel Arroyo; el secretario de Economía Social de la Nación, Emilio Pérsico; y el subsecretario de Promoción de la Economía Social, Daniel Menéndez.

 

La iniciativa fue confirmada por Pérsico a un grupo de legisladores e intendentes de la provincia de Corrientes que visitaron Buenos Aires; el Gobierno pretende lanzar las modificaciones a fines de febrero. Se calcula que después del 20 de febrero

 

Es decir que con el nuevo sistema a implementarse, cada beneficiario de un plan social,  en el marco de una política de seguridad social, tendrá un trabajo.

 

El salario mínimo se va a conformar en un 50 por ciento con recursos de la Nación y la otra mitad deberán completar las Provincias, los Municipios o las instituciones donde los beneficiarios cumplan una tarea laboral.